Este plato de origen humilde es uno de los más extendidos por toda la geografía castellano leonesa, es el similar a la merluza guisada pero con ese toque casero su preparación es muy sencilla y no deja lugar a dudas que a todos les encantará, una versión que nosotros podemos realizar es la de ponerle las almejas al ajillo con el plato terminado, quédate y disfruta como nosotros lo hacemos al cocinarlo para ti.
Lavamos, pelamos las patatas y las partimos en medallones , las salpimentamos y las vamos pasando por harina de tres en tres o un numero que nos de para defendernos, las empapamos bien en el huevo batido y las freímos en aceite abundante.Las reservamos para ir preparando la salsa.
Para la salsa pochamos la cebolla junto con el ajo y agregamos el caldo de pescado y vino blanco, ponemos a punto de sal e introducimos las patatas rebozadas. las dejamos cocinarse por espacio de 15 minutos.
Preparamos una picada con unas ramas de perejil. las almendras crudas y un puñito de sal pàra ayudarnos, lo incorporamos a nuestro guiso para espesarlo un poco.
En este paso decidiremos si añadimos las almejas y las dejamos cocer por espacio de 5 minutos o bien las preparamos en una sartén a parte al ajillo, esto ahora que nuestro plato sea mucho más aromático.
Truco de la Yaya
Para que no se pongan las patatas oscuras u oxidadas es recomendable realizar la tarea de limpieza pelado y picado momentos antes de freírlas.
Almejas sin tierra, dejarlas reposar un par de horas en un agua de mar, esta la obtendremos incorporando sal a un agua de botella, aproximadamente 35 gr de sal por litro de agua.
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